LA BENDICION DE LAS ESCRITURAS - por el élder D. Todd Christofferson
El propósito central de todas las Escrituras es llenar nuestras almas de fe en Dios el Padre y en Su Hijo Jesucristo. El 6 de octubre del año 1536, a una figura lastimosa se le condujo de un calabozo del Castillo Vilvorde, cerca de Bruselas, Bélgica. Durante casi año y medio, el hombre había tenido que soportar estar aislado en una celda oscura y húmeda. Ahora, fuera de los muros del castillo, el prisionero fue atado a un poste. Tuvo tiempo de pronunciar en voz alta su oración final: “¡Señor!, abre los ojos del rey de Inglaterra”, tras lo cual fue ahorcado. De inmediato, quemaron su cuerpo en la hoguera. ¿Quién era ese hombre, y cuál era la ofensa por la cual tanto las autoridades políticas como eclesiásticas lo habían condenado? Se llamaba Guillermo Tyndale, y su crimen fue haber traducido la Biblia al inglés y haberla publicado. Tyndale, nacido en Inglaterra en la época en que Colón zarpó hacia el nuevo mundo, se educó en Oxford y Cambridge y llegó a ser integ...